jueves, 7 de julio de 2011

Sé que últimamente no soy yo misma, pero no es mi culpa, lo siento.


Podemos querer olvidarnos de esa persona, de sus gestos, sus manías, de lo que te hacía sentir cuando te miraba, de la ilusión que te embargaba cuando sabías que ibas a verle. Puedes odiarle, evitar verle, puedes querer borrar todos lo recuerdos que tienes de él, pero lamentablemente la memoria no borra, esconde.
Y no puedes vivir escondiendo lo que sientes en todo momento e intentando hacerte creer a tí y a los demás que eso ya no existe. Claro que existe, existe lo que sientes, lo que sueñas, lo que vives, lo que recuerdas, ¿o esa sonrisa que aún conservas no significa nada? No te engañes, es muy diferente lo que quieres de lo que tienes, y mucho más aún de lo que puedes tener.

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